EXPLORA VIETNAM Y CAMBOYA EN GRUPO

Ponemos rumbo a Vietnam desde el aeropuerto, con la ilusión de vivir una experiencia única. Este país del sudeste asiático nos espera con su rica historia, paisajes que quitan el aliento y tradiciones que cautivan a cualquiera. Mientras volamos, aprovecharemos para relajarnos y cargar energías, porque lo que viene promete ser un viaje lleno de momentos inolvidables y emociones intensas.

¡La aventura acaba de comenzar!

Nada más aterrizar en Hanoi, nuestro guía de habla española nos dará una cálida bienvenida para comenzar a descubrir esta ciudad vibrante. Mientras nos dirigimos al centro, disfrutaremos de las primeras imágenes de sus calles bulliciosas y sus serenos lagos, un contraste que define a la capital vietnamita.

Tendremos tiempo libre para familiarizarnos con el ambiente local y, por la tarde, nos sumergiremos en el Mercado Dong Xuan, un auténtico festín para los sentidos. Allí, entre colores, aromas y sonidos, podremos disfrutar de la esencia del día a día en Hanoi.

El recorrido continúa en un paseo en cyclo por el casco antiguo, conocido como “las 36 calles”, un entramado de historia, comercio y arquitectura colonial con joyas como el Teatro de la Ópera y la Catedral de San José. Terminaremos con una tranquila caminata junto al Lago Hoan Kiem y su emblemático Puente Huc, un lugar cargado de leyendas. El resto de la tarde es libre para explorar o relajarnos, con cena por cuenta propia.

Después del desayuno en el hotel, nos reuniremos con un guía local para descubrir los grandes símbolos de Hanoi. Comenzaremos con una parada frente al imponente Mausoleo de Ho Chi Minh, un lugar que rinde homenaje al líder más emblemático de Vietnam. También admiraremos la singular Pagoda del Pilar Único, una estructura única que parece flotar sobre el agua.

Nuestra siguiente etapa será el Museo de Etnología de Vietnam, cuya entrada está incluida. Este museo nos abrirá una ventana a la diversidad cultural del país, mostrando las tradiciones y costumbres de los 54 grupos étnicos que conforman Vietnam, una auténtica inmersión en su riqueza cultural.

Por la tarde, visitaremos el Templo de Ngoc Son, situado en una pequeña isla del Lago Hoan Kiem, al que accederemos paseando. Más tarde, tendremos tiempo libre para explorar el encantador Barrio Antiguo, ideal para fotografiar, pasear o comprar artesanías y textiles típicos. Opcionalmente, podremos asistir a una cena temática con espectáculo de marionetas de agua, una tradición artística muy especial.

El día estará lleno de posibilidades para descubrir Hanoi a nuestro ritmo. Pasear por el bullicioso barrio antiguo, donde las 36 calles rebosan de vida y oficios tradicionales, o visitar templos como Quan Thanh, dedicado al dios taoísta Tran Vu, o la histórica Pagoda Tran Quoc, ubicada en un islote del Lago Oeste, un remanso de paz rodeado de paisajes únicos.

También podremos optar por una excursión a Ninh Binh y Tam Coc, donde la naturaleza y la cultura se funden entre arrozales y formaciones kársticas. Navegaremos en un bote tradicional por el río Ngo Dong, entre montañas verdes y cuevas de piedra caliza, para vivir una experiencia que conecta con la esencia más auténtica de Vietnam.

El recorrido incluye la visita a la Pagoda de Bich Dong, un santuario tranquilo construido en una cueva con vistas espectaculares, y a Hoa Lu, antigua capital con templos dedicados a los reyes Dinh y Le. Al regresar a Hanoi, la noche quedará libre para disfrutar de una cena y seguir explorando los sabores locales.

Después del desayuno en el hotel, nos dirigiremos hacia la impresionante Bahía de Ha Long, donde subiremos a bordo de un junco tradicional para comenzar nuestro crucero. Navegaremos entre miles de islas e islotes que emergen majestuosos del mar, creando un paisaje natural único que ha sido reconocido como una de las siete maravillas naturales del mundo.

Durante la travesía, disfrutaremos de un exquisito almuerzo a bordo mientras admiramos las impresionantes vistas que nos rodean. El resto del día será para relajarnos y dejar que la belleza de la bahía nos envuelva en un ambiente de calma y serenidad.

Al caer la tarde, degustaremos una cena incluida en el crucero y pasaremos la noche acomodados en el barco, rodeados por las tranquilas y misteriosas aguas de esta joya del sudeste asiático.

Para los más madrugadores, el día comenzará con una clase de tai chi en la cubierta del barco, una forma perfecta de llenarnos de energía y calma. A continuación, disfrutaremos de un desayuno a bordo mientras navegamos por los paisajes más impresionantes de la Bahía de Ha Long.

Al llegar al puerto, desembarcaremos para volver a Hanoi y tomar un vuelo hacia Da Nang. Desde allí, nos trasladaremos a Hoi An, un pueblo lleno de encanto que nos enamorará con sus calles empedradas, coloridas linternas y arquitectura colonial.

Por la noche, haremos un paseo guiado por el casco antiguo, cruzando el emblemático Puente Japonés y empapándonos del ambiente mágico que crean sus calles iluminadas. La cena será libre, ideal para descubrir la gastronomía local. Finalmente, nos alojaremos en un hotel acogedor en Hoi An.

Tras el desayuno, nos adentraremos en la esencia de Hoi An, una joya histórica que fue uno de los puertos más importantes del sudeste asiático. Acompañados por nuestro guía, recorreremos su casco antiguo, declarado Patrimonio de la Humanidad, donde cada rincón refleja siglos de tradición y comercio internacional.

Durante el recorrido, contemplaremos el famoso Puente Japonés, visitaremos el Templo Chino Phuc Kien y descubriremos el pasado marítimo de la ciudad en el Museo de Historia Sa Huynh. El mercado local nos regalará una experiencia sensorial única entre aromas, colores y escenas de la vida cotidiana.

Después del almuerzo libre, dispondremos de la tarde para seguir disfrutando de Hoi An a nuestro ritmo. Podremos relajarnos en la tranquila playa de An Bang, descubrir encantadores cafés junto al río o simplemente perdernos por las calles adoquinadas de esta ciudad que conserva intacta su alma tradicional. Una jornada para conectar con la parte más auténtica y pausada de Vietnam.

Tras dejar atrás la calma imperial de Hue, ponemos rumbo al sur con un vuelo hacia Ho Chi Minh, la ciudad más vibrante y cosmopolita de Vietnam. Aterrizamos en esta urbe que nunca duerme para iniciar una visita panorámica junto a nuestro guía local. Caminaremos por la Plaza de la Commune de París, admirando la Catedral de Notre Dame, la icónica Oficina de Correos y el Palacio de la Reunificación, todos ellos símbolos del pasado colonial y contemporáneo del país.

Nos adentraremos después en el barrio de Cholon, el corazón del distrito chino, donde el mercado local y la Pagoda Thien Hau nos sumergen en un ambiente lleno de contrastes, espiritualidad y vida cotidiana.

El resto del día será libre para seguir explorando al ritmo que queramos. Una buena opción es dejarse llevar por el caos ordenado de sus calles, descubrir rincones inesperados o saborear un café con huevo. Al anochecer, el Night Food Market nos espera con su bulliciosa energía y mil aromas que resumen el alma gastronómica del sur vietnamita.

Últimas horas en Ho Chi Minh para disfrutar de su energía. Podemos aprovechar para pasear por sus animados mercados, hacer las últimas compras o simplemente observar el ir y venir de motos desde una terraza con café vietnamita. Quienes deseen profundizar en la historia reciente del país, podrán unirse a la visita opcional a los Túneles de Cu Chi, una red subterránea que revela la increíble resistencia de quienes lucharon durante la guerra.

Después, nos dirigiremos al aeropuerto para volar hacia Siem Reap, en Camboya. A la llegada, realizaremos el trámite del visado y pondremos rumbo al hotel para instalarnos.

La tarde queda libre para una primera toma de contacto con la ciudad. Una buena idea es acercarse al Mercado Nocturno de Siem Reap, un espacio repleto de color, souvenirs y propuestas gastronómicas. Para cenar, podemos probar platos típicos como el amok trey o el lok lak, dos especialidades camboyanas llenas de sabor y tradición.

La jornada nos llevará a descubrir los Templos de Angkor, uno de los conjuntos arqueológicos más asombrosos del mundo. Empezaremos por Angkor Thom, antigua capital imperial, donde destacan el Templo Bayon, con sus misteriosas caras esculpidas, y otros monumentos como el Baphuon, el Phimeanakas o las terrazas del Rey Leproso y de los Elefantes, testigos silenciosos del esplendor jemer.

Seguiremos con la visita a Ta Prohm, donde la selva ha tomado el control. Las raíces gigantes envolviendo muros y columnas convierten este lugar en una escena mágica, como sacada de una película. Aquí, la naturaleza y la arquitectura se entrelazan creando una atmósfera única.

Por la tarde, llegará el momento más esperado: la visita a Angkor Wat, el templo más emblemático de Camboya. Con sus torres simétricas y bajorrelieves minuciosos, es una obra maestra del arte sacro. Pasear por sus pasillos y contemplar sus reflejos en el estanque es una experiencia que emociona y que queda grabada para siempre.

Antes de despedirnos de Camboya, tendremos la oportunidad de vivir dos experiencias inolvidables. Una de ellas es asistir a una ceremonia tradicional en el Templo Wat Damnak, donde los monjes locales nos ofrecerán una bendición espiritual colocando un hilo sagrado en la muñeca. Este ritual, lleno de calma y simbolismo, es una hermosa forma de cerrar el viaje.

La otra opción nos invita a explorar el Lago Tonle Sap, el más extenso del sudeste asiático. Subiremos a un barco para navegar entre las casas flotantes de Chong Kneas, descubriendo cómo es la vida sobre el agua en estas singulares comunidades locales.

Por la tarde, pondremos rumbo al aeropuerto para tomar el vuelo de regreso a España. Atrás quedarán los templos, los mercados, los paisajes y los sabores, pero llevaremos con nosotros una colección de recuerdos y emociones que perdurarán mucho tiempo. Noche a bordo.

Finaliza nuestra aventura, pero las emociones compartidas, los momentos vividos y los paisajes descubiertos permanecerán en nuestra memoria. Ha sido un viaje lleno de contrastes, de culturas fascinantes y rincones inolvidables.

Volvemos a casa con la maleta repleta de experiencias, sonrisas y mil historias por contar. Gracias por acompañarnos en este recorrido único.

¡Hasta el próximo destino!