ESCAPADA LISBOA SINGLE EN AGOSTO

La aventura comienza cuando, tras meses de mensajes por Whatsapp, por fin nos encontramos cara a cara. Algunos llegan en bus nocturno, otros en coche, y quienes vuelan, se reúnen en el aeropuerto donde nuestra coordinadora os espera para llevaros juntos al hotel y dejar las maletas.

Empezamos a descubrir Lisboa explorando su casco histórico, un mosaico de barrios que marcan el carácter de la ciudad. Pasearemos por Baixa, el corazón comercial reconstruido tras el terremoto del siglo XVIII. Sus plazas — Restauradores, Rossio, Figueira y la emblemática Plaza del Comercio — nos reciben a través de la vibrante Rua Augusta, la calle que nunca duerme.

La ruta sigue hacia el animado Barrio Alto, accesible en el icónico tranvía o en el centenario Elevador de Santa Justa, una joya inspirada en la arquitectura de Gustave Eiffel, que regala vistas únicas de Lisboa.

A mediodía, pausa para saborear la auténtica gastronomía portuguesa en Baixa: bacalao, pulpo, sardinas… la coordinadora os guiará para no perder detalle.

Por la tarde, el barrio de Alfama nos espera con su alma de pescadores y el eco del fado en cada rincón. Visitaremos el imponente Castillo de San Jorge, cuyo mirador ofrece panorámicas inolvidables.

La jornada termina con una cena grupal cerca del hotel, donde compartiremos las primeras impresiones de este viaje que acaba de empezar. ¡Lisboa ya nos ha conquistado!

Tras un desayuno en el hotel, nos reuniremos en el hall para partir hacia Sintra en tren (billete incluido), una joya declarada Patrimonio de la Humanidad por su equilibrio perfecto entre naturaleza y patrimonio histórico.

Sintra, el rincón más pintoresco de Portugal, ha inspirado a artistas y escritores como Lord Byron, que la describió como “el lugar más encantador de Europa, con palacios y jardines en medio de rocas y vistas al mar y al Tajo”. Con semejante carta de presentación, no puedes dejar de descubrirlo en persona.

En lo alto de la sierra nos espera el colorido Palacio da Pena, máxima expresión del romanticismo portugués. Su arquitectura parece sacada de un cuento bávaro, con un aire misterioso gracias a la niebla que lo envuelve. Pasearemos por sus salones y sus exuberantes jardines que te atraparán por completo.

Después, regresaremos al centro para comer y, si el tiempo lo permite, podrás visitar el Palacio Nacional con sus emblemáticas chimeneas blancas.

Por la tarde, disfrutaremos de una visita poco común: la enigmática Quinta da Regaleira. Guiados por nuestra coordinadora, exploraremos su jardín lleno de simbolismo masónico, un auténtico laberinto de secretos.

Antes de tomar el tren de regreso a Lisboa, haremos una parada para degustar los dulces típicos de la zona, el toque final de un día para recordar.

Cenaremos juntos en grupo para compartir impresiones y experiencias.

Después de un desayuno en el hotel, nos encontraremos en el hall para seguir explorando la ciudad. Por la mañana, nos sumergiremos en el histórico Barrio de Belém, cuna de grandes descubrimientos que marcaron la época dorada del Imperio portugués. Desde sus costas zarparon las embarcaciones de Vasco de Gama en busca de la ruta marítima hacia la India. ¿Sabías que Portugal fue el primer país europeo en llegar a numerosos destinos? Paseando por sus calles, lo descubrirás.

En Belém visitaremos joyas como el Monasterio de los Jerónimos y la emblemática Torre de Belém, además del Monumento a los Descubridores, el Puente 25 de Abril y el Museo Nacional de Carros.

Para reponer fuerzas, nos deleitaremos con los auténticos pastéis de nata en la antigua fábrica donde se elabora esta delicia, cuyo secreto sigue siendo un misterio bien guardado.

La tarde estará dedicada a conocer la Lisboa más contemporánea. Pasearemos por los barrios de Bairro Alto y Chiado, con sus tiendas únicas y ambiente vibrante.

Para cerrar el día, una cena en Bairro Alto acompañada del melancólico sonido del fado, la esencia más pura de la cultura portuguesa. ¡Una experiencia que no te puedes perder!

Después del desayuno en el hotel, tendrás la mañana libre para explorar a tu ritmo los alrededores antes del traslado al aeropuerto. Podrás pasear por el Cementerio de los Placeres, la Plaza de Campo Pequeno o los Jardines de Eduardo VII. Nuestra coordinadora estará disponible para ayudarte a organizar la mañana según tus intereses.

Otra opción ideal es visitar el moderno Parque de las Naciones, antigua sede de la Expo 1998, ahora un espacio vibrante con restaurantes, tiendas y jardines junto al río. No te pierdas la impactante Estación de Oriente, una joya arquitectónica diseñada por un famoso arquitecto que descubrirás al verla.

Y así, de manera ligera y llena de recuerdos, toca despedirse. Seguro que vuelves con la maleta y el corazón repletos de momentos inolvidables. Pero esto es solo el comienzo, ¡queda mucho por descubrir juntos!

¡Nos vemos en la próxima aventura!